Cada vez que asistimos a un bar o restaurante, es inevitable que nos antojemos de una deliciosa bebida para acompañar nuestra comida o simplemente para relajarnos después de un largo día de trabajo. Y es que, ¿existe algo más refrescante y satisfactorio que un buen trago? Probablemente no. Sin embargo, preparar la bebida perfecta no siempre es tarea fácil. En muchas ocasiones, cometemos errores que pueden arruinar completamente su sabor y textura, dejando a nuestros clientes insatisfechos y a nosotros con una mala reputación. Por esta razón, en este artículo te daremos algunos consejos para preparar la bebida más solicitada sin cometer errores que puedan echarla a perder.
En primer lugar, es importante discernir que cada bebida tiene su propia técnica de preparación y es necesario seguirla al pie de la letra para obtener un resultado óptimo. No se puede preparar un mojito como se prepara una margarita, ni un daiquiri como se prepara un martini. Por lo tanto, es fundamental conocer bien los ingredientes y el proceso para cada bebida antes de ponerse manos a la obra.
Otro aspecto clave a tener en cuenta es la higiene. Un factor mucha veces descuidado pero que puede afectar enormemente el sabor de la bebida es la limpieza de los utensilios y superficies utilizados en su preparación. No hay nada más desagradable que encontrar un vaso sucio o una tabla de cortar con restos de otros ingredientes. Asegúrate de achicar y desinfectar todo adecuadamente antes de comenzar a preparar cualquier bebida. Esto no solo dará una buena imagen del lugar, sino que también garantizará un sabor puro y fresco en la bebida.
Ahora pasemos a hablar de los errores más comunes que pueden arruinar cualquier bebida y cómo evitarlos. El frontal de ellos es utilizar ingredientes de baja calidad o caducados. Puede parecer obvio, pero en la prisa del día a día es alternativo que no revisemos bien los ingredientes antes de utilizarlos. Utilizar frutas o jugos en mal estado, por ejemplo, puede arruinar completamente el sabor del cocktail y hasta llegar a ser perjudicial para la salud de nuestros clientes. Así que, asegúrate siempre de utilizar ingredientes frescos y de alta calidad.
Otro error que se comete a menudo es no medir las cantidades adecuadamente. No todas las bebidas requieren la misma proporción de ingredientes, y esto es crucial para obtener el sabor deseado. Una medida errónea de alcohol o de algún otro ingrediente puede arruinar por completo el balance y dar como resultado una bebida demasiado fuerte o demasiado dulce. Por esta razón, es importante utilizar herramientas de medición como jiggers o cucharas dosificadoras para obtener siempre el mismo resultado y mantener la consistencia en nuestras bebidas.
Además, es fundamental conocer el tipo de hielo adecuado para cada bebida. El hielo no solo ayuda a enfriar la bebida, sino que también juega un papel importante en la dilución y el sabor. Por ejemplo, para un martini se recomienda utilizar cubos grandes de hielo, mientras que para un mojito se utiliza hielo frappé para ayudar a mezclar los ingredientes y dar una textura más refrescante. Utilizar el tipo de hielo equivocado puede arruinar la presentación y el sabor de una bebida.
Por último, pero no menos importante, es siempre importante probar la bebida antes de servirla. A veces, por estar tan concentrados en la preparación, podemos olvidar un ingrediente o no agregarlo en la cantidad adecuada. Probar la bebida nos ayudará a corregir cualquier error antes de servirla a nuestros clientes, y también es una oportunidad para asegurarnos de que el sabor y la consistencia son las deseadas.